lunes, 4 de julio de 2011

“WINE EMOTIONS VILA REAL 2011”. DESCUBRIENDO EL DOURO A TRAVES DE SUS VINOS. 1ª Parte

Si, ya lo se, me considerareis un vago tremendo. Hace mucho que no escribo, y he acumulado un montón de historias que contar. Siempre podéis castigarme con el látigo de vuestra indiferencia, pero si lo hacéis, no podréis criticar lo mal que escribo, jajajaja.

   Una vez dicho esto, voy a contaros la última aventura. Tras asistir hace casi un mes al Master Trade Fiae en Viana do Castelo, una de las mejores cosas que saqué de ese evento, fue el conocer al reputado y conocido periodista portugués, Fernando Melo. Escribe en las revistas más importantes de vinos de Portugal y además pertenece a los paneles de cata más importantes del sector. Pero lo mejor, es que es un tipo fantástico. Un amante de su país de los de verdad, lo que le permite al mismo tiempo ser un duro critico con lo que se hace mal, y además, no le duelen prendas en dar caña cuando tiene que darla. Pero también, ese amor a su tierra, hace que defienda con muchísima pasión las cosas buenas que tienen. Precisamente, el propio Fernando Melo me invito a asistir al “Wine Emotions 2011” que se celebró estos días en Vila Real, capital de la región de Tras-os-montes, bañado por el Río Corgo que es afluente de un Douro que nos encontramos en Peso da Regua, a tan solo 20 kilómetros de Vila Real. Entre montes escarpados y hoces tremendas, nos encontramos kilómetros y kilómetros de socalcos, que guardan en sus viñas ese bien tan preciado que son sus vinos. Acepte la propuesta de un Fernando Melo, que sabía que estaba invitado a un profano profundo en el mundo de los vinos, pero a pesar de ello no lo dudó, lo cual quiero agradecerle encarecidamente.
Cata de Portos Vintage en la "Wine Emotions 2011"(Vila Real). Foto: Jose Manuel García

   Y ahora una reflexión. Todos sabéis que realizo un programa gastronomico y lo hago con verdadera pasión. Esto nunca me ha convertido (ni quiero) en un critico gastronómico ni mucho menos, por que eso son palabras mayores. Tampoco se si realmente el ser critico gastronomico, existe como titulo oficial. Yo prefiero que el ser critico gastronomico lo da las muchas experiencias vividas y sobre todo el saber contarlas desde una perspectiva lo mas objetiva posible. En mi caso, me considero un comunicador, un contador de historias. Historias en mi caso vividas en primera persona y desde un punto de vista muy personal, sin la mínima intención de sentar cátedra ni nada que se le parezca. Si a esto le añadimos que en el mundo de los vinos, no tengo absolutamente ni idea, os podéis imaginar la información técnica que podéis esperar de mi, muy poca. Una vez aclarado esto, mi única forma de explicar todas estas cosas, es contando mis sensaciones, o si algo me gusta o no me gusta.
Calle de Vila Real, con los productores de Vino repartidos por varias calles en el "Wine Emotions 2011". Foto: Jose Manuel García.

   Y ahora, toca escuchar el relato, de este profano en el mundo de los vinos, que casi ni controla de los de su tierra, imaginaos lo que puedo controlar de los de otro país. EL viernes llegué a Vila Real con el tiempo justo de dejar las maletas en el hotel (www.casadalevada.com) e irme raudo y veloz hasta los claustros de la Cámara Municipal de Vila Real, donde se celebraba un Master Tasting(una cata muy especial) de Portos Vintage “Perlas escondidas, secretos bien guardados” + música de los Locos años 70 (alumnos del conservatorio). Allí tengo que decir que además de la pasión en la dirección de la Cata de Fernando Melo, se unió la profesionalidad de la periodista especializada de raíces gallegas Cristina Alcalá y los conocimientos de uno de los mejores sumilleres de España Bruno Murciano. 
De izda a dcha, Cristina Alcalá, Fernando Melo y Bruno Murciano. Foto: Jose Manuel García
Y allí, en aquel claustro tan acogedor, en una mesa montada para unos 30 asistentes, nos quedamos con la boca abierta (hasta que empezamos a catar claro) ante las joyas enologicas que allí se nos ofrecían. Repito que no entiendo de esto, pero hablamos de vinos, que probablemente poca gente vaya a tener la oportunidad de probar. Para los que si entienden, pongo la relación de dichas joyas a continuación a la que añado una breve descripción hecha por el propio Fernando Melo:

1- Rozés Vintage 1977
            En este vino tratamos de encontrar la esencia de lo que fue la cosecha de 1977. El regreso al “estilo clásico”, reencuentro con los mercados internacionales y, sobre todo, la elegancia que marco todo ese año. Rozés es una marca que se asocia tanto a tawnies de gran calidad como al Porto Vintage, este ultimo tal vez en una línea que aun urge descubrir y conocer mejor.

2- Warre’s Vintage 1977
            El estilo de la casa Warre es inconfundible, por su elegancia y feminidad. La Quinta da Cavadinha, parte del lote en el que entra este vino fabuloso, se encuentra en el margen derecho del Río Pinhao y nacen todos los años unas uvas antológicas. En este momento están a trabajar en los términos de concentración y equilibrio de los néctares que origina. El Vintage 1977 del que hablamos es prácticamente el paradigma del año, donde pocos consiguen igualarlo en lo completo, su complejidad y el placer. Hay que recordar que el vino fue hecho para alegrar el corazón del hombre y abrir su alma a la realización plena!!

3- Croft Vintage 1977
            Un ejemplar esplendido de la familia de vinos de Oporto Croft. Taninos muy finos y un foco conceptual en la longevidad que no era  muy usual en esa época, en la que los vinos (incluso los vintage) se entendían y percibían como vinos dulces. Se trata de un vino muy fino, que sigue en equilibrio desde el principio hasta el final de la prueba. Tiene mucho todavía que dar!!

4- Grahams Vintage 1970
            Aquí tenemos un vino que aparece muy poco en catas, pero que cuando se prueba no se olvida nunca más. Porque? 1970 es un año de esplendor, de apertura y descubrimiento. Según Fernando Melo, que perdonen aquellos a los que les gusta leer cosas muy concretas y muy reales sobre los vinos, por que con este es imposible ser objetivo. Es como querer explicar por que canciones como “pink panter”, “Cocaine” o “Yellow Submarine” están hoy en la cabeza y fantasía de todo el mundo. Aquí Fernando nos anima a que todo aquel que quiera se levante y grite, Viva el Vino de Oporto!!

5- DOW`s Vintage 1970
            Que decir de este vino? Donde buscar la inspiración para decir palabras que no sean banales? Este es uno de los Vintage del siglo XX y tal vez dentro de 200 años sea la reformulación del paradigma. Encontramos en este vino, Fuerza, Flor, Pino, Miel y Hoja de tabaco.

6- DOW`s Vintage 1977
            Para hacer un dueto espectacular con el anterior!!. Un vino fantástico y un vino que los críticos suelen darle puntuaciones muy elevadas. Un Gran Vino, que para aquel al que no le interesa la puntuación, más que eso, nos cuenta toda una historia. Un lugar, un hombre, un momento, un paisaje, una emoción…..

7- GRAN CRUZ COLHEITA 1975
            Este vino aparece al final de esta cata para que podamos ver en conjunto dos cosas importantes:
- La verdadera esencia, historia y futuro del Vino de Oporto es el tiempo. El tiempo que el se demora en madurar. El tiempo que pasó desde que fue hecho hasta ahora que lo probamos. El tiempo que le queda por delante. El Vino de Oporto es mayor que el hombre.
- Al paso de 3 o 4 décadas el Vintage y el Tawny se encuentran. En el color. En los aromas. En la boca…
GRAN CRUZ COLHEITA 1975. Foto: Jose Manuel García
 Hasta aquí la visión de los expertos, que es la verdaderamente importante. La mía? Bufff. Pues que me sorprenden mucho los vinos de Oporto. Que para mi es impresionante escuchar que vinos con treinta y cuarenta años, se hable de ellos pensando en el gran futuro que tienen!! Son vinos ricos, sabrosos, melosos. Vinos golosos pero no empalagosos. Reconozco que en algunos la sensación alcohólica (para alguien que es muy poco bebedor como yo) es potente, pero que se contrarresta con las agradables sensaciones que te deja en la boca. Por la mía han pasado sabores de fruta madura, cerezas, guindas, flores, madera, hoja de tabaco, café,…no se, tantos! Para mi desde luego, lo mejor de no ser experto, es que te permite disfrutar de estas cosas con la sorpresa del recién llegado, del ignorante…y todos sabéis que no hay nada mejor que la alegría del ignorante…

Hasta aquí la primera parte. La segunda, la de los blancos del Douro, otra exquisitez y sorpresa que contaré más tarde…